Psicoterapia computerizada: ¿Será tu próximo terapeuta un
ordenador?
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Es probable que alguna vez hayas oído hablar de ELIZA. A
mediados de la década de 1960, Joseph Weizenbaum, un científico de la
computación en el Instituto de Tecnología de Massachusetts, desarrolló un
programa de computadora para simular a un psicoterapeuta aplicando una terapia
que emulara el método humanista de Rogers. ELIZA (así se llamó el programa)
hizo preguntas abiertas con la intención de animar al usuario a discutir sus
emociones.
Weizenbaum se sorprendió al ver como los usuarios hablaban
íntimamente de sus problemas, hasta tal punto que cuando el experimento
terminó, algunos sujetos se negaron a creer que no habían estado intercambiando
mensajes con un psicoterapeuta real y en vivo.
Han pasado casi 50 años desde que ELIZA se desarrolló. Si
tenemos en cuenta todos los deslumbrantes logros tecnológicos de las últimas
cinco décadas, es fácil hacerse esta pregunta: “Si un programa tan simple
funcionó tan bien en la década de 1960, ¿qué podemos esperar de un terapeuta
artificial en la actualidad?“.
¿Qué es la terapia computerizada?
La”terapia computarizada” es independiente de otras
disciplinas relacionadas con las intervenciones de salud mental en línea. La
psicoterapia en vivo se lleva a cabo tradicionalmente mediante sesiones cara a
cara entre un paciente y un terapeuta. Hoy en día es posible que la
psicoterapia se lleve a cabo a través de Internet, mediante correo electrónico
o videoconferencia. Esto se conoce comúnmente como terapia en línea, online, o
e-Terapia.
Del mismo modo, los tratamientos de autoayuda estaban
inicialmente disponibles a través de libros, CDs, DVDs, etc, pero ahora además
se puede acceder a ellos como programas basados en la web.
Si bien todas estas intervenciones apoyadas en Internet
implican necesariamente el uso de las computadoras, el término “terapia
computerizada” pone el énfasis en un aspecto diferente. El equipo está jugando
aquí un papel mucho más activo en la entrega del contenido clínico. En otras
palabras, el equipo es más que un medio para entregar ese contenido, y puede o
no estar conectado a Internet.
El fundamento de estos sistemas es similar al de los libros
auto-guiados. Básicamente, la idea es que el lector toma decisiones en los
puntos clave y estas decisiones afectan a cómo se desarrolla la historia hasta
el final.
Aplicado a un libro de autoayuda, se trataría de añadir de
forma encapsulada el conocimiento clínico necesario para realizar
intervenciones focalizadas, en función de un árbol de decisión previamente
diseñado. Finalmente, se llega a un punto en que cada lector tiene ante sí un
único camino terapéutico basado en su propio perfil.
El problema de publicar un libro como éste es que hay un
gran número de posibles condiciones, síntomas, causas, comportamientos,
pensamientos, etc El libro sería demasiado complicado de usar y de diseñar. Sin
embargo, la idea es buena y perfectamente adecuada para su implementación en
forma de software. Esto, en pocas palabras, es una de las ideas clave que
encontramos tras el concepto de terapia computerizada. En cierto modo podemos
considerarla una progresión natural del paradigma de auto-ayuda.
Algunas formas de terapia, como la terapia
cognitivo-conductual (TCC), son especialmente adecuadas para este tipo de
entrega algorítmica. Sin embargo, otras técnicas de terapia , como las que
dependen más de la relación terapeuta/cliente , son mucho más difíciles de
automatizar.
Las ventajas de la terapia computarizada
El ejemplo anterior ilustra una ventaja importante de la
terapia respecto a los tratamientos computarizados autoguiados tradicionales:
la capacidad de adaptar de forma automática el contenido clínico a las
necesidades del usuario. La personalización es un activo y prometedor campo de
investigación. Pero hay otras ventajas:
Escalabilidad ilimitada. Es en la intersección entre el
tratamiento informatizado y las intervenciones basadas en Internet, donde las
cosas se ponen realmente emocionante. Para los sistemas en línea totalmente
automatizados, no hay límites prácticos en el número de clientes que pueden ser
tratados de forma simultánea.
Contenido mejorado. La terapia computerizada puede ser mucho
más que el texto en una pantalla. Los programas pueden ser ricos en contenido
multimedia, con texto, imágenes, vídeos , animaciones, locuciones de audio y
ejercicios interactivos. Un programa de tratamiento bien diseñado puede suponer
una experiencia muy convincente para el usuario.
Evolución del contenido. El momento en que un libro es
publicado supone la congelación de su contenido. Sin embargo, las terapias en
línea computerizadas pueden ser modificadas en cualquier momento para
asegurarse de que se están utilizando sólo los métodos de tratamiento más
actuales y basados en la evidencia.
¿Es eficaz la Terapia computerizada?
¿Puede llegar un terapeuta virtual a ser tan eficaz como un
terapeuta humano? Esta pregunta está abierta para el debate, pero creo que es
bastante seguro decir que los ordenadores no van a reemplazar a los seres
humanos en el corto plazo.
Sin embargo existen muchas razones por las que debemos estar
atentos a las nuevas formas de tratamiento, la principal de ellas sin duda,
para llegar a un público más amplio.
Hay un sinnúmero de personas en el mundo
que viven con una enfermedad mental para la que hay tratamientos efectivos
disponibles, sin embargo, la gran mayoría de estas personas nunca asistirá a
una sesión de terapia en persona. Con la
tecnología de hoy en día tenemos la posibilidad de llegar a estas personas y
mejorar sustancialmente su calidad de vida.
En esta línea, existen ya un buen número de programas
computerizados, basados en protocolos de Terapia Cognitivo-Conductual, que se
dirigen principalmente al tratamiento de problemas de ansiedad y depresión
leve, y que han mostrado en diversos estudios y meta-análisis una relación
coste-efectividad realmente prometedora.
La Terapia computerizada es todavía joven y se encuentra en
constante y rápida evolución.
Es un tema candente en la psicología académica, y
un buen número de productos comerciales están ya disponibles. Quedan por
delante retos importantes, incluyendo cuestiones clínicas, legales,
tecnológicas y éticas. Sin embargo, no hay duda de que los sistemas
computarizados en línea tendrán un papel importante en el futuro de la
psicoterapia.
Ofrecemos para su descarga un interesante estudio realizado
en la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile (Mauro Medeiro et al.)
que bajo el título “Uso de programas de terapia cognitivo-conductual
computarizada para la prevención y tratamiento de depresión en adolescentes” se
ocupa de revisar la literatura sobre el uso de programas de TCC computarizada
en el contexto mencionado.
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